Enlaces de accesibilidad

noticias

REPARADO EL DIQUE ROTO EN NUEVA ORLEANS


Cleo Allen, vocero del Departamento de Transporte y Desarrollo del Estado de Luisiana, informó el lunes que la rotura del dique en el canal de la Calle 17 fue sellada por helicópteros que dejaron caer una enorme cantidad de sacos de arena en la brecha de unos 70 metros que el huracán abrió, pero que la tarea de secar la ciudad podría durar meses.

En una muestra de solidaridad nacional, un número creciente de ciudades no afectadas por la tormenta abren sus puertas y brazos para alojar a los refugiados que todo lo han perdido y además la comunidad internacional continúa su movilización para ayudarlos.

Los ex Presidentes de Estados Unidos, George Bush, padre del actual Presidente y Bill Clinton, anunciaron que han creado un fondo privado de ayuda que hasta el lunes había recibido muchos millones de dólares, incluyendo 23 millones de la cadena de tiendas Wal-Mart. Otras grandes compañías como Microsoft, Dillard’s, Nike y el Grupo Trump han anunciado su participación.

El subjefe de policía de Nueva Orleans, Warren Riley, dijo que la ciudad ha quedado completamente destruida y que los sobrevivientes deben abandonarla inmediatamente. Riley hizo la declaración mientras cientos de socorristas registraban casa a casa buscando sobrevivientes. Muchas veces hallaban cadáveres. El Alcalde de Nueva Orleáns, Ray Nagin, ha declarado que la cifra de muertos podría llegar a diez mil.

El presidente George W. Bush volvió a recorrer el lunes las zonas devastadas de Luisiana y Misisipí, donde más de medio millón de refugiados son alimentados y alojados después de ser rescatados de las comunidades destruidas en la costa del Golfo de México.

Se acusa al gobierno federal de haberse demorado mucho en ayudar a los damnificados, aunque más recientemente han estado surgiendo defensores de la ayuda federal aportada, alegando que era materialmente imposible prever la magnitud de lo ocurrido: vías terrestres de comunicación arrasadas, comunicaciones electrónicas totalmente destruidas, pistas de aterrizajes anegadas por metros de agua donde los aviones no podían posarse para descargar la ayuda, y demás. Un portaaviones de la Marina de Guerra estaba situado frente a la costa del Golfo de México para ayudar en las operaciones de búsqueda y rescate.

El gobierno federal ha enviado a más de 50 mil soldados de línea y reservistas a la región del desastre para que ayuden a mantener el orden y dar asistencia a decenas de millares de sobrevivientes. El general Russel Honore, que dirige la coordinación de la ayuda humanitaria en Nueva Orleans, cree que “un número significativo” de personas murieron y los socorristas continuaban el martes rescatando sobrevivientes y recogiendo muertos.

XS
SM
MD
LG