Sin embargo, ahora sólo tres de un grupo de 20 norcoreanos lograron su objetivo, ya que las autoridades chinas retuvieron a los otros 17 cuando intentaban atravesar la valla que rodea la sede diplomática.
En 2003, un total de 1.285 norcoreanos llegaron a Corea del Sur huyendo del régimen comunista de Pyongyang, que castiga la salida ilegal del país con penas de confinamiento en campos de trabajo y, en ocasiones, con la pena de muerte.