El jefe de la delegación americana en esa Comisión, el embajador Richard Williamson, declaró que la situación en esa base es un tema serio que merece ser discutido con seriedad y no en el "circo político" que era la moción del gobierno de La Habana.
Cuando la prensa la preguntó si era posible que Estados Unidos permita el ingreso de inspectores de derechos humanos de Naciones Unidas en el centro de detención de Guantánamo, Williamson respondió que la única prisión que el Comité Internacional de la Cruz Roja puede visitar en la isla de Cuba es, precisamente, la de la Base Aeronaval de Guantánamo.
El Embajador agregó que el deseo de Estados Unidos es que todas las prisiones, incluyendo aquéllas que tienen el número más alto de presos políticos en el mundo entero – las prisiones de Fidel Castro – sean abiertas a los observadores internacionales. El gobierno de Castro ha negado la entrada a la isla de una inspectora de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Además, la semana pasada la Comisión reunida en Ginebra, aprobó una resolución que condena las violaciones de los derechos humanos en Cuba y reitera la demanda de que La Habana permita la visita de la funcionaria inspectora de la Oficina del Alto Comisionado Para los Derechos Humanos.
Mientras tanto, el Parlamento Europeo aprobó una resolución que condena el encarcelamiento de disidentes políticos en Cuba y declaró que el encarcelamiento de esos opositores viola los más elementales derechos humanos, en especial la libertad de expresión y de asociación política.
La resolución europea exhorta al régimen de Fidel Castro a poner inmediatamente en libertad a los 75 disidentes, defensores de derechos humanos y a los periodistas independientes que fueron encarcelados el año pasado en la Isla.
Las organizaciones izquierdistas no apoyaron la resolución, pero fue aprobada con el sólido respaldo de las organizaciones Popular, Liberal, Unión de las Naciones de Europa y Europa de las Diferencias y Democracias.
La Eurocémara dijo que los objetivos de la política exterior de la Unión Europea se basan en la promoción del respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales, así como el fomento de los procesos de transición hacia la democracia pluralista y que por ese motivo reclama que el gobierno comunista de Cuba dé señales significativas en ese sentido.
Asimismo la resolución europea pide el máximo respeto para el proceso constitucional de recogida de firmas realizado por el Proyecto Varela sobre la base del Artículo 88 de la Constitución Socialista vigente en Cuba. Ese artículo constitucional autoriza a los ciudadanos a presentar una iniciativa legislativa siempre que se recojan 10,000 firmas o más, cosa que se ha informado que han logrado los promotores del Proyecto Varela.
El gobierno castrista ha rehusado reconocer el derecho de sus ciudadanos a utilizar el Artículo 88 para buscar reformas políticas.
El régimen castrista acusó el jueves a la Unión Europea de "complicidad en las violaciones de los derechos humanos en Guantánamo". El gobierno de La Habana dijo que los europeos le comunicaron que no respaldarían una moción castrista ante la Comisión de Derechos Humanos en Ginebra, para que se investigara las condiciones de los sospechosos de terrorismo detenidos en la Base Aeronaval de Estados Unidos en Guantánamo, Cuba. Poco después el gobierno de Castro optó por retirar su moción.
El Ministro de Relaciones Exteriores castrista, Felipe Pérez Roque, ha dicho que lo que ha sucedido no limitará a Cuba en el intento de establecer un diálogo con la Unión Europea para impulsar las relaciones bilaterales y manifestó que así la Unión Europea tendrá la oportunidad de "rectificar la magnitud de su error".