"El Consejo tomó nota de la decimocuarta evaluación de la Posición Común de la Unión Europea sobre Cuba. El Consejo reiteró que los objetivos de la Unión Europea en sus relaciones con Cuba continuaban siendo alentar el proceso de transición pacífica hacia la democracia pluralista y el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales, así como la recuperación económica sostenida y el mejoramiento del nivel de vida del pueblo cubano.
"El Consejo tomó nota de la desalentadora falta de progreso del gobierno cubano hacia la realización de los objetivos de la Posición Común desde la evaluación anterior de junio del 2003.
"En particular el Consejo expresó su seria preocupación por la presente violación en gran escala de los derechos humanos en Cuba. Condenó fuertemente el juicio y sentencia en abril y mayo del 2004 de un grupo de 16 activistas de derechos humanos y periodistas y la continuada detención de grandes números de prisioneros de conciencia, incluyendo los que fueron detenidos durante la represión de las autoridades cubanas en marzo y abril del 2003. El Consejo pidió a Cuba que liberte inmediatamente a todos esos detenidos por razones políticas.
"El Consejo expresó pesar por la imposición de nuevas restricciones a la empresa privada con posterioridad a la última evaluación, que ha tenido consecuencias negativas para muchos cubanos. Reiteró su opinión de que la apertura de la economía cubana beneficiaría a todo su pueblo, mientras que expresó su rechazo de todas las medidas unilaterales contra Cuba que son contrarias a las reglas comúnmente aceptadas del comercio internacional. Nunca ha sido política de la Unión Europea tratar de causar el cambio con medidas coercitivas cuyo efecto sea aumentar la penuria económica del pueblo cubano.
"El Consejo reafirmó la validez de la Posición Común de 1996 y reiteró que la relación constructiva sigue siendo la base de la política de la Unión Europea con Cuba. El Consejo observó que aunque todos los objetivos de la Posición Común no se han logrado todavía, el aislamiento de Cuba no contribuiría a este esfuerzo. El Consejo enfatizó la importancia que la Unión da al diálogo para producir resultados tangibles en lo político, económico y en las esferas de los derechos civiles y la cooperación. La Unión Europea permanece receptiva a la reanudación de ese diálogo.
"El Consejo condena fuertemente la actitud inaceptable del gobierno cubano hacia las delegaciones de la Unión Europea en La Habana y pide a Cuba que respete los principios y prácticas internacionalmente aceptados. El Consejo también expresó pesar por el rechazo de Cuba a la cooperación de la Unión Europea y reiteró que continúa dispuesto a proporcionar cooperación de la Unión Europea a Cuba, cuando las condiciones lo permitan, en áreas que promuevan la transición hacia la democracia pluralista y el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales, así como en áreas que promuevan el crecimiento económico sostenido y el mejoramiento de los niveles de vida de la población cubana. Desde mediados de la década de 1990, la Unión Europea se ha convertido en importante socio de Cuba en la promoción del comercio, la inversión y el turismo, mediante la cooperación y los intercambios culturales y académicos.
"A resultas de la falta de progreso hacia el mejoramiento de la situación de derechos humanos, el Consejo reafirma que las medidas aprobadas el 5 de junio del 2003 permanecerán, incluyendo la invitación a miembros de la oposición pacífica y otros miembros de la sociedad civil, junto con gobiernos representativos, a sus festejos nacionales, como en otras partes del mundo. En contexto con su política de relación constructiva, la Unión Europea y sus Estados Miembros continuarían también proporcionando apoyo a eventos culturales en Cuba y exhortando a las autoridades cubanas a evitar obstruir este proceso".
(Fin del texto del comunicado provisional del Consejo)