Enlaces de accesibilidad

Trump como fruto del rechazo a la política tradicional


Donald Trump, candidato presidencial republicano. Universidad de Miami, 10 de marzo de 2010 de 2016. Foto: Luis Felipe Rojas.
Donald Trump, candidato presidencial republicano. Universidad de Miami, 10 de marzo de 2010 de 2016. Foto: Luis Felipe Rojas.

Este año los votantes republicanos querían a una persona alejada de los centros de poder político en la nación. Querían a alguien diferente. Y : ¿Quién mejor que el millonario magnate Donald Trump?.

Este rechazo a los políticos tradicionales es la razón por la cual Trump ha podido salir ganador de una serie de primarias electorales donde, al comienzo de las mismas, habían 17 candidatos con aspiraciones presidenciales. Trump les ganó a todos. Casi se puede decir que lo hizo con facilidad, poniéndole un adjetivo cruel a cada uno de sus contrincantes.

Ganó con tanta facilidad que ni siquiera tuvo que hablar mucho de sus principios, de su política. Para muchos de los que votaron por él no les molestó que Trump no explicara su política para gobernar si fuese electo presidente.

Pero ahora, cuando todo parece indicar que Trump va a tener que medirse contra la ex primera dama, la ex senadora y la ex Secretaria de Estado, Hillary Clinton, las cosas cambian. Y Trump no tiene ni un pelo de bobo.

Todavía el senador de Vermont Bernie Sanders dice que él continuará en la contienda hasta que se termines las primarias a principios de junio. Las posibilidades de ganar la nominación de Sanders son mínimas por no decir casi imposible.

Trump sabe que en las elecciones generales de noviembre las cosas van a ser más difíciles y él va a tener que empezar a detallar sus ideas como conservador. Antes de ser candidato Trump no tenía que hacer esto. El dice y repite que como hombre de negocios el le daba dinero a muchas campañas políticas, entre ellas a la que hoy sería su rival en las elecciones de noviembre.

Pero ahora Trump tiene que convencer a un gran número de votantes que sus principios son el de un candidato conservador. Por eso publicó esta semana una lista de 10 de las personas que él consideraría como candidatos para el Tribunal Supremo. Todos en la lista tienen amplias credenciales con el ala conservadora del Partido Republicano.

El multimillonario también ha decidido que para la contienda en noviembre va a tener que recaudar dinero. No va a poder auto-financiar su campaña. Y para eso ya tiene personal que buscan recaudar mil cien millones de dólares.

Otra cosa que hizo el candidato republicano fue presentar datos sobre su fortuna. Los documentos presentados dicen que Trump tiene más de 10 mil millones de dólares y que en el 2015 ganó más de $500 millones. Sin embargo, Trump continúa negándose a presentar su declaración de impuestos que anualmente el IRS – agencia que verifica todos las declaraciones de impuestos presentadas por los norteamericanos anualmente.

Trump dice que no puede hacerlo porque sus declaraciones de impuestos están siendo auditadas. Voceros del IRS dicen que esto no debe impedir que Trump presente sus impuestos. Pero el candidato está negado a hacerlo, lo cual sería el primer pretendiente a la presidencia en más de 40 años que no los divulga.

Ya el sitio Real Clear Politics, uno de los medios más serios en temas de política estadounidense, ha comenzado a medir como serían unas elecciones entre Clinton y Trumpo. De acuerdo al mencionado sitio cibernético, Clinton aventaja a Trump por poco más de tres puntos en el promedio de todas las encuestas realizadas a la fecha. El promedio de las misma le da la ventaja a Clinton por 3,1 porciento.

Clinton también esta delante de Trump en tres de los estados que tradicionalmente son los más reñidos – Florida, Ohio y Pensilvania. En la Florida, el promedio de encuestas ahora le da la ventaja a Clinton por un 46,5 a 42,2. En Ohio Clinton también tiene la delantera – 45,8 a 42,5. Y en Pensilvania, Clinton aventaja a Trump por siete puntos – 45,8 a 38,8.

En estos momentos Clinton lleva la delantera, pero faltan cerca de seis meses para las elecciones. Y en las mismas siempre puede ocurrir cualquier cosa. Trump tiene una tarea difícil. Pero después que él barriera el piso con sus contrincantes republicanos, nadie va apostar en contra de él. Clinton no va a ser tan fácil como sus rivales republicanos.

Trump ya está listo y ha comenzado su campaña, a la vez que una organización que respalda a Clinton ha puesto al aire una serie de comerciales usando a Trump en sus propias palabras – hablando mal de los inmigrantes indocumentados, de los musulmanes y de las mujeres.

Hay sólo una cosa que se puede aseverar. La campaña va a ser reñida.

XS
SM
MD
LG