La representante de Naciones Unidas quiere que se incremente el número de trabajadores y monitores en Darfur, ciudad de donde la Alta Comisionada acaba de regresar después de una visita de observación que se extendió por una semana.
Hablando ante periodistas en Ginebra, Arbour recalcó que los desplazados de Darfur viven bajo el terror y aseguran también que las fuerzas de seguridad del gobierno están en complicidad con las milicias árabes acusadas de las masacres.
Naciones Unidas estima que más de un millón de personas han sido desplazadas por la guerra civil y los ataques de las milicias árabes en la región.