Los miembros del coro que cantarán en la misa presidida por el papa Francisco en Holguín no tendrán mucho que temer del inclemente sol que calienta habitualmente la región oriental. Para cada uno de ellos, el artesano Luis Cruz Reyes y miembros de su familia han confeccionado los sombreros de yarey que lucirán ese día.
La información aparece publicada en el sitio de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, bajo la firma de la periodista Araceli Cantero.
Este maestro sombrerero lleva 26 años ejerciendo este oficio. Ahora está muy contento de poder hacer este servicio para la misa del Papa, explica el reportaje. Para confeccionar los sombreros, Cruz cuenta con la ayuda de su esposa Marisol Leiva Quevedo y de sus suegros. El equipo familiar lleva tres meses en esta tarea.
Para hacer un sombrero debe ir al campo y cortar una especie de palma que se conoce como yarey. "Se ha de cortar cuando está verde, se mantiene a la sombra 3 o 4 días y luego ya se pone al sol para tomar su textura y color", explica Cruz Reyes. Deben pasar unos 15 días desde que se corta el yarey hasta iniciar la confección del sombrero.
Completar un sombrero puede llevar día y medio si se trabaja seguido, aclara el maestro artesano. Él tiene varios modelos y los hace según se lo pida un vaquero, un ganadero o una mujer.
Para la misa papal se ha elegido el modelo de pamela para las mujeres y otro con el ala más corta para los hombres.
"Una vez recibidos en el Obispado tres voluntarios les colocaron la cinta tricolor con los colores de la bandera cubana. Los mismos colores de las camisetas que vestirá el coro", explica Cantero.
Cruz Reyes vive en el Reparto Victoria de la ciudad de Las Tunas. Está muy agradecido al padre Pedro Pablo Ladrón de Guevara, sacerdote oriundo de esta ciudad y encargado de la Liturgia Papal, que le pidió este servicio. Cruz Reyes dice que si pudiera regalarle un sombrero al Papa, sería un gran honor.
