El mandatario reconoció el legado de Powell y su esposa Alma con la entrega del premio John Thompson durante una ceremonia que tuvo lugar en el Centro Kennedy, de la capital de Estados Unidos, y donde calificó al funcionario como el más efectivo y admirado diplomático en la historial de la nación.
George W. Bush dijo que hace cuatro años, cuando buscaba a un Secretario de Estado, quería a alguien con sabiduría y decencia, a un líder respetado que tuviera fe profunda en los valores de la nación y que pudiera compartirlos con el mundo.
El mandatario describió a Colin Powell como un servidor público incansable, generoso y con principios, que ayudó a unir a Estados Unidos en tiempos de guerra, a resolver conflictos regionales y a enfrentar los retos de desastres naturales y la pobreza.
El presidente George W. Bush conmemoró el 76 aniversario del nacimiento de Martin Luther King, al recordar cómo el asesinado líder de los derechos civiles cambió a Estados Unidos por medio del amor a sus ideales esenciales y a su desencanto por las promesas de libertades incumplidas.