La Asamblea para Promover la Sociedad Civil en Cuba y la coalición Todos Unidos denunciaron en un comunicado que el régimen de Cuba obliga a los inversionistas a contratar mano de obra cubana a una agencia gubernamental que retiene el 95 por ciento del salario pagado en moneda extranjera.
Mediante esta práctica el gobierno de la isla “saca provecho de la debilidad presente de la nación cubana bajo un régimen estalinista represivo”, subrayaron los opositores.
Las organizaciones disidentes criticaron que continúen extendiéndose las violaciones de los derechos humanos en Cuba sin que haya una respuesta por parte de la Unión Europea.
La declaración antecede a la reunión que los cancilleres del bloque regional celebrarán el próximo lunes, y en la que se prevé que decidirán si la Unión Europea mantiene o no la suspensión de las sanciones diplomáticas que había adoptado contra el régimen cubano tras la ola represiva del año 2003.