El comunicado, que puede verse en el portal web de la Primera Iglesia Unitaria de Portland, Oregon, fue redactado por Carol y Mark Slegers, Harriet Denison y Jacquie Jones, miembros del proyecto Cuba AyUUda.
El texto señala que para todo el grupo fue una experiencia perturbadora, pero que para los nueve que se vieron obligados a dormir en el piso de mármol del aeropuerto José Martí, sin saber qué sucedería con ellos, fue aterradora.
Esta experiencia -agregan los misioneros- ha profundizado nuestra compasión por las personas que se ven impotentes a merced de autoridades indiferentes e inflexibles.
La declaración apunta que el viaje era el decimocuarto en siete años, bajo licencia legal, del proyecto Cuba AyUUda, cuyo objetivo es fomentar el entendimiento entre los dos pueblos y asistir a organizaciones que atienden las necesidades de las mujeres, niños, ancianos, pacientes de VIH-SIDA y niños diabéticos.