“La situación clínica después de los primeros días del ingreso se ha hecho más complicada. El estado de salud del paciente requiere tratamiento apropiado que necesitó su traslado durante la tarde a una unidad adecuada para su estado”, dijo en una declaración el Hospital Percy, situado en Clamart, un suburbio de París.
En respuesta a una pregunta un portavoz del hospital respondió: “El señor Arafat no ha muerto”. En Ramalá, Cisjordania, un alto funcionario palestino dijo que algunos de los poderes del Presidente de la Autoridad Palestina han sido transferidos a su Primer Ministro, Amed Kureya.
Una información de la prensa de Israel dijo que Arafat estaba “clínicamente muerto”, pero poco después un médico manifestó que aunque no estaba clínicamente muerto, su estado había empeorado.
“El todavía está vivo. No está clínicamente muerto. No hay muerte cerebral, pero su estado está empeorando”, dijo el médico Ashjraf Al-Kurdi.
Los médicos han sometido a Arafat a una batería de análisis desde que fue llevado a Francia el viernes pasado con fuertes dolores estomacales, vómitos y diarreas. Sin embargo, todavía no han divulgado un diagnóstico del mal que lo aqueja, aunque han descartado la leucemia. El miércoles trascendió que se estaba pensando en la posibilidad de un envenenamiento.
El Hospital Percy se especializa en trauma, cáncer y enfermedades de la sangre.
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