Játami aseveró que si la EU con sede en Bruselas, reconoce el derecho de Irán a producir tecnología nuclear con propósitos pacíficos, el gobierno iraní está dispuesto a prometer al mundo que no fabricará armas atómicas.
El mandatario iraní subrayó que su país no será presionado a suspender el programa nuclear y que toda decisión al respecto será voluntaria.
Teherán encara posibles sanciones de Naciones Unidas si continúa sus programas de enriquecimiento de uranio.