Después del fracasado ataque, los dos buques — el USS Ashland y el USS Kearsarge — salieron del puerto y se alejaron rumbo a mar abierto en busca de aguas seguras. Habían participado en maniobras navales con la Marina de Guerra de Jordania.
El alto mando de la Quinta Flota de Estados Unidos con sede en Barein dijo que faltó poco para que uno de los cohetes hiciera blanco en el USS Ashland diseñado para transportar en combate soldados, lanchones de desembarco y helicópteros.
“Puedo confirmar que un cohete pasó sobre la proa del USS Ashland e hizo explosión en el tejado de un almacén (del puerto). Ningún marinero o soldado de la Infantería de Marina resultó herido”, dijo el capitán de navío Jeff Breslau, de la Quinta Flota de Estados Unidos. Una fuente militar jordana dijo que ese cohete mató al soldado Amed Alnajdahui, que estaba de guardia en el almacén.
El grupo Abdulá Alk-Azzam, que dice que tiene vínculos con la red terrorista internacional Al-Kaeda en el Cercano Oriente, informó en una página musulmana de Internet que había efectuado el ataque. Esta declaración no pudo ser confirmada inmediatamente. La página de Internet donde se hizo suelen usarla otros grupos que también dicen que tienen vínculos con Al-Kaeda.
Fuerzas jordanas acordonaron Akaba y su barrio industrial después del fallido ataque, pero el puerto, que es parte importante de la logística de Estados Unidos para la guerra en Iraq, siguió funcionando con normalidad.
Una fuente dijo que fuerzas de seguridad del gobierno jordano buscaban a “un sirio y dos iraquíes” que estaban en Akaba y habían sido vistos en un automóvil con placas de Kuwait.
Otra fuente manifestó que fueron dos los cohetes modelo Katyusha disparados desde un almacén portuario que hace pocos días fue alquilado por tres iraquíes y un egipcio. Otras autoridades creían que fueron tres.