El Congreso de 130 diputados y 27 senadores, autorizó a la Corte Suprema instaurar el juicio por 126 votos a favor —21 más de los dos tercios necesarios— al término de una sesión plenaria que comenzó el miércoles y duró más de 13 de horas, hasta el jueves de madrugada.
Sin embargo, la resolución legislativa aún requiere la aprobación de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia.
La aceptación o rechazo de la acusación formulada en el Congreso será resuelta por los tres magistrados de la Sala Penal, que son los ministros Jaime Ampuero, Héctor Sandoval y José Luis Baptista después de revisar el requerimiento que presentó en enero pasado la Fiscalía General de la República.
El actual Presidente de Bolivia, Carlos Mesa, elogió el jueves la decisión del Congreso en un comunicado del Palacio de Gobierno. Dijo Mesa que "esta decisión fortalece la democracia y renueva la fe de la ciudadanía en sus instituciones".
Por su parte, sindicatos obreros, dirigentes de organizaciones sociales y líderes de la oposición también elogiaron la decisión legislativa.
"No creíamos que el Congreso aprobaría. Estamos satisfechos aunque será un largo camino, pero no descansaremos hasta que los responsables vayan a la cárcel", declaró Marcial Canaviri, representantes de los familiares de las víctimas de la represión durante el; gobierno de Sánchez de Lozada.
Sánchez de Lozada huyó de Bolivia y vive en Washington desde que renunció a la Presidencia el 17 de octubre del 2003.