Según la agencia estatal de noticias, es probable que el número de muertos ascienda a medida que los equipos de socorro se desplacen a poblaciones remotas en la región afectada.
Docenas de temblores secundarios y la lluvia hacen más difíciles los esfuerzos humanitarios. Mucha gente pasó la noche a la intemperie o en tiendas de construcción casera.
Las organizaciones internacionales de la Cruz Roja y la Media Luna Roja apelaron por más de 2 millones de dólares para ayudar a los damnificados del sismo.