La reunión, auspiciada por las Naciones Unidas, congrega a funcionarios de 80 países, incluyendo a 12 directamente afectados por el desastre natural ocurrido el 26 de diciembre.
Hasta el momento, la comunidad internacional ha prometido alrededor de 4 MIL millones de dólares en asistencia para las víctimas del maremoto.
El director de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, Andrew Natsios, representa a Washington en la conferencia de Ginebra.
El extraordinario flujo de contribuciones tras la tragedia que causó al menos 157.000 muertos “muestra lo mejor de la Humanidad”, aseguró ante la prensa el coordinador de las operaciones de urgencia de la ONU, Jan Egeland.
Pero en este tipo de catstrofe “existe una diferencia entre las generosas promesas y el dinero que efectivamente se entrega”, subrayó antes del inicio de la conferencia, que él preside. Según Egeland, “es importante obtener el dinero rpidamente, y gastarlo rápidamente”.
“Queremos que los donantes se hagan responsables de lo prometido y de lo entregado”, explicó el coordinador.
La ONU anunció que la empresa estadounidense de auditoras Price Waterhouse Coopers asegurará gratuitamente el control financiero de las sumas desembolsadas, para garantizar la transparencia y limitar los riesgos de malversación en los países donde la corrupción es endémica, como Indonesia.