Reportes desde la isla comfirman que ya se ha sumado la capital cubana al desabastecimiento de alimentos y de combustible, que hasta el momento era visible solo en provincias del interior del país y que hay inestabilidad en las oficinas de Wester Unión y Cadeca, a la hora de que los residentes accedan a cambiar o retirar los dólares que reciben de remesa.